La esclavitud moderna es el reclutamiento, el transporte, la recepción y el albergue de personas para explotar su trabajo, y afecta a casi todas las partes del mundo. A nivel mundial, se estima que hay más de 40 millones de hombres, mujeres y niños en situaciones de esclavitud moderna en la actualidad. Estas víctimas, que se encuentran en fábricas, zonas de obras, pesquerías y burdeles, se ven obligadas a trabajar por poco o ningún salario, privados de su libertad y, a menudo, sometidos a un sufrimiento inimaginable.
La mayoría de los productos agrícolas que compramos han pasado por un proceso de crecimiento, cosecha, producción, empaquetamiento y distribución conocido como cadena de suministro. Las cadenas de suministro comienzan con un cultivador o productor y terminan con el producto terminado que compramos los consumidores. La esclavitud moderna se puede encontrar en cualquier etapa de estas cadenas de suministro.
Cómo luchar contra la esclavitud moderna
- Las políticas internas y externas relacionadas con la esclavitud moderna deben implementarse o ajustarse con precisión. Estas incluyen códigos de conducta, certificaciones anuales de cumplimiento, lenguaje contractual estándar, cuestionarios de diligencia debida y declaraciones de conformidad del proveedor.
- Las prácticas de compra deben revisarse y adaptarse a un enfoque más responsable. Esto incluye estudiar y llegar a comprender el impacto del cálculo de costes, la previsión de cosecha y la gestión de la carga de trabajo de los proveedores.
- Los esfuerzos de mapeo de la cadena de suministro deben apuntar a una trazabilidad completa del producto, desde el alimento en la granja hasta los productos terminados. Esto ayuda a realizar evaluaciones de riesgo efectivas para identificar posibles vulnerabilidades de esclavitud moderna en todos los niveles. Este ejercicio debe involucrar a una variedad de empleados de la empresa, incluidos los de responsabilidad social corporativa y legal, gestión de la cadena de suministro, riesgos y recursos humanos. Una vez completada, se debe ofrecer formación a los empleados y a los socios comerciales en todos los niveles para mejorar la comprensión del problema.
- Se deben realizar auditorías de investigación entre proveedores nuevos y existentes para esclarecer las condiciones reales que a las que se enfrentan los trabajadores a lo largo de la cadena de suministro. Estas investigaciones deben verificar que:
- Todos los trabajadores tienen contratos de trabajo escritos en un idioma que comprenden
- Los contratos no se han sustituido ni en origen ni en destino
- Los contratos cumplen con las leyes laborales locales
- Se respetan los límites legales y de la industria sobre las horas de trabajo
- Todas las deducciones están incluidas en el contrato dentro de las regulaciones legales o de la industria.
- No se tolera la retención de salarios
- No hay restricciones a la libertad de movimiento
- Las tarifas de contratación y de intermediación que pagan los trabajadores están dentro de los límites legales establecidos por los gobiernos de origen de los trabajadores
- Los trabajadores conservan copias de sus documentos de identificación, o tienen acceso libre a sus documentos, en caso de que los dejen en manos de sus empleadores para que los guarden en un lugar seguro
- No hay sobrecoste ni ningún otro método que lleve a la dependencia del trabajador y a la negación de su elección
- Las empresas deben asegurarse de que los trabajadores dispongan de mecanismos de reclamación, como aplicaciones telefónicas o líneas directas de terceros. Esto permite a los trabajadores proporcionar información fundamental sobre sus condiciones de trabajo de forma segura.
- Se deben implementar programas de desarrollo de capacidades para equipar a los proveedores con la experiencia y las herramientas adecuadas para comenzar a implementar cambios dentro de sus operaciones comerciales, con el objetivo de distribuir estos conocimientos y responsabilidades en la cadena de suministro.
- Las empresas de alimentación deben unirse a las iniciativas de múltiples partes interesadas que unan a los agricultores, los trabajadores, la sociedad civil y los gobiernos para centrarse en métodos estratégicos y prácticos para reducir colectivamente la esclavitud moderna.
- Si la esclavitud moderna se encuentra en cualquier parte de una cadena de suministro agrícola, las empresas deben tener un plan para abordar el problema de manera efectiva y remediarlo. Esto debería incluir una respuesta que proteja a los trabajadores de cualquier daño adicional, les brinde apoyo, opciones de rehabilitación y les ofrezca acceso a recursos judiciales y extrajudiciales.
Nuestro artículo "Lucha contra la esclavitud moderna: cómo puede ayudar el sector agrícola" incluye más detalles sobre este problema crítico de la industria alimentaria, incluyendo medidas adicionales que pueden tomar las organizaciones para ayudar a disminuir su prevalencia.